La historia de la estación Buenavista

Uno de los transportes por excelencia del México independiente era el tren, ya que desde sus andenes y estaciones era posible recorrer gran parte de la metrópoli mexicana y conectarse con distintos puntos del país, algunas de las estaciones del  tren tienen grandes historias dignas de ser contadas, como por ejemplo la de Buenavista.

La Hacienda de Buenavista fue el lugar donde se construyó una de las primeras estaciones de trenes de México, la llegada del ferrocarril significó el desarrollo del país y ese sitio se convirtió rápidamente en la puerta de entrada para las miles de personas que visitaban la capital.    

La primera línea de trenes de México cubría la ruta México-Veracruz, que fue construida durante el gobierno de Sebastián Lerdo de Tejada, no fue sino hasta el gobierno de Porfirio Díaz cuando se construyó una importante cantidad de vías férreas en el país.

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La estación Buenavista fue ideada por el empresario Antonio Escandón y construida en 1873, la edificación se hizo en lo que fueron los terrenos de la Hacienda Buenavista, la estación contó con el diseño neoclásico del alemán J. Muller.

Gracias a la estación de trenes, la colonia Guerrero creció, los patios de maniobras de Buenavista se encontraban en la colonia Nonoalco y en Tlatelolco se encontraba la aduana.

Las colonias aledañas, como la Tabacalera, aprovecharon para vivir del comercio que generó la estación, incluso algunos hoteles prosperaron por los viajeros del tren.

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A medida que la ciudad crecía y con el paso del tiempo, la estación Buenavista quedó en medio de la ciudad, fue cuando se decidió demolerla y que cediera parte de su terreno para levantar la sede del Partido de la Revolución Institucional (PRI), también otorgó espacio para la construcción de la alcaldía Cuauhtémoc.

Transcurrieron 40 años después de su inauguración y el 1 de septiembre de 1999 Ferrocarriles Nacionales de México finalizó sus operaciones en el país y la estación Buenavista dejó de ser propiedad de la nación, por lo que quedó en desuso y fue abandonada.   

La zona tuvo un resurgimiento cuatro años después, debido a que en el 2003 inició la construcción de la Biblioteca Vasconcelos cuya inauguración se dio en el 2006.

Se reacondicionó la estación para la construcción del Tren Suburbano y Fórum Buenavista, por lo que se demolieron partes de los antiguos andenes, la vías se redujeron de 12 a 4 y en el 2008 se inauguró la nueva estación Buenavista.

Poco queda de lo que fue una de las partes más transitadas de la ciudad en su tiempo, una estación que conectó a la ciudad y que fue parte importante de su desarrollo comercial y social.

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Fuentes: Pie de página, La Silla rota

@Cronicamexicana