La carrera contra la memoria

Alzheimer

Parece chiste político, pero es más que cierto que los mexicanos no tienen memoria, literalmente andan por la vida como peces con recuerdos de tres segundos. Un enemigo silencioso, que se ha metido poco a poco en los hogares mexicanos, se llama Alzheimer y es una enfermedad progresiva y destructiva, pero no mortal por sí misma.

Este padecimiento es una especie de larga agonía, en la que se van olvidando las cosas, como un cerebro que muy lento se funde, hasta olvidar sus tareas más primitivas, como abrir los ojos y respirar.

Es como imaginarte que una mañana, al abrir los ojos, no sabes quién eres, dónde estás, cómo te llamas o qué tienes que hacer después.

Al menos en México, no se está haciendo demasiada conciencia respecto del tema, y sin embargo, está teniendo un aumento alarmante, de casi un millón de casos nuevos al año, que simplemente no tienen cura ni esperanza, porque aún no la hay.

Se le atribuyen causas alimenticias, hereditarias, de contaminación, toxicidad en el agua, los productos químicos y los hábitos nocivos que dañan las células cerebrales.

Hoy en día hay casi un millón de mexicanos que sobreviven al Alzheimer y dependen completamente de la ayuda de otros, porque la característica principal del padecimiento es que progresa hasta provocar discapacidad, dependencia y deterioro total en la calidad de vida.

Alzheimer, el padecimiento de los mexicanos

Se sabe que a nivel mundial, el 70% de las enfermedades de la vejez están relacionadas con el Alzheimer, y a pesar de ello, en los últimos años ha empezado a entrar en personas cada vez más jóvenes, como una pandemia imparable, que se relaciona con la herencia genética, pero también con los malos hábitos de alimentación, descanso y ejercicio físico.

Adicionalmente, en México todavía se trabaja por la concientización acerca de esta enfermedad, ya que hasta hace poco tiempo, todavía los pacientes eran diagnosticados de forma errónea con demencia senil.

El desconocimiento y la falta de información, ha provocado la constante incomprensión hacia quienes lo padecen, por lo que una buena parte de ellos terminan siendo abandonados en asilos o centros de cuidado, pues sus familiares no quieren lidiar con lo que implica este trastorno.

El 30% de los ancianos mexicanos, mayores de 80 años, tiene Alzheimer en algún grado, y se sabe que en un futuro, a mediano plazo, representarán a la mitad de la población de esa edad.

Valeria Lira

@CronicaMexicana