8 de marzo, ¿qué celebran las mexicanas?

8 de marzo

Ser mujer y ser mexicana son dos factores que, por sí solos, ya dicen bastante y requieren de muchos pantalones para quien los lleva. Y es que en este país, pertenecer al género femenino no es una cuestión sólo biológica, también acarrea una serie de estereotipos, roles, obligaciones, y hasta precauciones que hay que tomar, si uno quiere hacerlo bien. Pero justo el 8 de marzo es del día para reflexionar sobre este papel.

feminismo

En México hay más de 60 millones de mujeres, más de la mitad de la población de todo el país y cuyo papel cada día va teniendo más relevancia en todos los ámbitos. Eso, aún a pesar de que la sociedad mexicana sigue caracterizándose por ser netamente machista, y hay costumbres y creencias en torno a eso, que no han podido ser arrancadas de raíz.

Pese al progreso social, que desde hace décadas significa la liberación de la mujer, y la amplia difusión de sus derechos, la realidad es que en México la actitud generalizada contra ellas, se ha tornado mucho más violenta, y parece que una parte de la sociedad lo ve como una especie de castigo, una consecuencia casi obligada, de haber salido a exigir igualdad.

Se calcula que nueve de cada diez mujeres mexicanas, han sufrido algún tipo de violencia, especialmente por parte de sus parejas. Esto hace unas cinco décadas, no habría sonado tan extraño, y es que precisamente las estadísticas también se deben a una enorme herencia machista, que ellas mismas propiciaron; “los hombres mandan y ellas obedecen, todos los hombres son iguales y las mujeres nacieron para servirles porque son el sexo débil, todas necesitan un hombre que las procure y las proteja”, y quién sabe cuántas cosas más, se vienen repitiendo de muchas generaciones atrás, como si se tratara de una piedra enorme que la sociedad carga.

8 de marzo y la lucha feminista

Y más recientemente, el resurgimiento del feminismo como una corriente que está atrayendo a las más jóvenes, quienes además reclaman su derecho de vivir y existir como cualquier ser humano, y finalmente lo ejercen. Esto ha levantado opiniones entre la población machista, la negación de la misma sociedad a ser diferente y reinterpretar los roles, que durante mucho tiempo se han impuesto como obligación.

Y es que las mujeres mexicanas son, aunque muchos no lo consideren, seres humanos antes que madres, esposas, novias o todos los papeles que se les cargan. Y por desgracia, viven en un país donde no se les considera así; cada día siete mexicanas son asesinadas, sin que nadie levante la mano o diga algo, y esa cifra se suma a la de miles que han muerto a lo largo de muchos años, por cuestiones como la discriminación, la segregación y la ignorancia, falta de atención médica, trata de personas, violencia de pareja y hasta esclavitud sexual o laboral.

Es más que cierto que el Día de la Mujer no es una celebración, más bien representa una oportunidad para reflexionar por qué no hemos dejado avanzar a las mujeres mexicanas, y cuántas más tienen que ser esclavas o morir víctimas de feminicidio, para entender que no es suficiente con poner los derechos humanos en un papel, para hacerlos válidos, y más bien hay que trabajarlos, enseñarlos y hacerlos reales en la vida diaria.

Valeria Lira

@CronicaMexicana