¿Qué hay en la alacena de los mexicanos?

Hábitos de comida

Los hábitos de comida puede develar muchas aristas del nivel de vida, la personalidad, la salud e incluso el nivel cultural y educativo de las personas. Un hábito tan cotidiano como comer, revela quién eres, a lo que te dedicas, tus manías y hasta las metas de tu existencia.

Se calcula que los mexicanos basan hasta el 60% de su dieta en alimentos procesados, lo que es la causa principal de la obesidad y las enfermedades metabólicas y cardíacas.

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Por otra parte, alimentos que son clave en la alimentación han sido expulsados de la alacena mexicana; verduras, frutas y granos integrales, han sido sustituidos por cereales azucarados, harinas blancas, refrescos y todo aquello saturado de químicos y grasas.

Hábitos de comida de mexicanos

Un factor que influye en la alacena mexicana es la economía. Una alacena bien llevada cuesta dinero y tiempo, alimentarse con inteligencia requiere ocuparse, pensar, buscar y cocinar, mientras la gran mayoría de los mexicanos, en especial aquellos que viven en las grandes ciudades, apenas si tienen tiempo de hacer una parada en la tienda de abarrotes para comprar frituras y refrescos, antes de llegar a la escuela o al trabajo.

Horarios laborales apretados, bajos salarios y poca cultura sobre el cuidado de la salud, hacen que la alacena sea un tema de segunda para la mayoría de los mexicanos, quienes suelen resolver sus necesidades inmediatas, mucho antes de reflexionar acerca de lo que se llevan a la boca.

Comer en zonas rurales

En las zonas rurales la dieta se salva un poco, debido a que aún se acostumbran los granos y el maíz como fuentes principales de alimentación. Mientras tanto, en las zonas desarrolladas penetra con fuerza la mercadotecnia, marcas que han engañado a los consumidores diciendo que son saludables, cuando en realidad son veneno netamente comercial.

Otros factores que influyen en la alacena mexicana son las costumbres. Hace décadas, cuando las personas tenían tiempo, comer era un rito que se hacía en familia, se planeaba con cuidado y requería conocimientos; actualmente se sabe que más del 40% de los niños mexicanos, comen acompañado de la televisión.

Es evidente que si los padres no se sientan a comer con ellos, aún menos ocupan su tiempo en preparar alimentos saludables, aunque para eso la comida rápida y los congelados cumplen su función sin problemas.

Ese último dato habla de cómo hemos modificado la costumbre de comer, de un asunto complejo, a un simple paso de un momento a otro del día. Y esto explica por qué la salud, íntimamente relacionada con la alimentación, va en un deterioro generalizado para la población mexicana.

¿Qué hay en tu alacena?

@CronicaMexicana