Dicen por ahí que el trabajo dignifica y enriquece a quien lo realiza. México es un país polémico cuando se trata de empleo, ya sea porque dicen que no hay, porque conseguir y estar en uno es casi imposible, o porque las condiciones que se ofrecen, en la mayoría de las empresas, no son tan sólo las mínimas que se deberían ofrecer.
Y a todo esto, una cuestión interesante es preguntar: ¿a qué se dedican los mexicanos? Viendo la situación y las dificultades con las que día a día sobrevive México, es interesante saber cómo hacen los que aquí habitan, para sortear las dificultades diarias y llevarse algo a la panza.
Dice Forbes que en México la tasa de desempleo es de 5.2%, una cifra que no ha variado demasiado en los últimos años, ni para bien ni para mal, como si el país estuviera estacado en una estabilidad sin crecimiento.
Un 8% de los mexicanos se dedica al sector de la construcción, un 9% a los servicios, el 11% a la manufactura y fábricas, el 18% al comercio, y el 34% a la comunicación, los bancos y el gobierno. El resto de la población se encuentra dividido entre el empleo informal y la desocupación, lo que es igual a que no tienen garantías de seguridad social, como salud y acceso al crédito de vivienda.
Si bien las cifras parecen más alarmantes de lo que son en realidad, sí sabemos que influyen bastante en el crecimiento del país a mediano y largo plazo, ya que una población desocupada o con ingresos bajos es una que no consume, lo que por consecuencia estanca la economía.
Otro dato relevante es sobre los salarios. El salario mínimo en México es de 73.04 pesos por día. Esto remite a que más de 500 mil personas en el país subsisten con un ingreso mínimo. México es el número 14 en la lista de los 15 países con salarios más bajos del planeta, y es incluso rebasado por países como Guatemala y Honduras, cuya situación no es mejor que la que se vive aquí.
Empleo en números
El 60% de la población mexicana es lo que se llama Población Económicamente Activa, lo que significa que es esa parte de las personas, que aportan algo al movimiento monetario del país, le dan juego a los bancos, poseen créditos y pagan impuestos. De ahí, unos tres millones son menores de 18 años, y se desempeñan en actividades domésticas o de tipo económico.
Otro aspecto importante del trabajo en México son las remesas. En 2015, el dinero que llegó al país, producto del empleo de mexicanos en otros países, fue de dos mil 188 millones de pesos. Es una cifra nada despreciable, si se toma en cuenta que la gran mayoría proviene de indocumentados que trabajan en Estados Unidos, y son el sustento de miles de hogares en este país
La conclusión puede ser que, pese a la difícil situación que México atraviesa, el hecho de que gran parte de la población se mantenga activa, así sea en el sector informal, permite que la economía siga teniendo un dinamismo importante, y no se caiga en patrones de crisis económica, tan graves como en Europa, donde el desempleo ha provocado la baja de sectores que antes tuvieron gran poder adquisitivo.
Valeria Lira