Lugares tenebrosos de la CDMX

No, no se trata de leyendas de fantasmas y aparecidos, es una cosa mucho más seria. Todas las ciudades tienen lugares tenebrosos, espacios que la gente ama porque le evocan recuerdos, porque la pasa bien en ellos y porque le parecen amigables con los habitantes. Sin embargo, también las ciudades tienen espacios que muchos quisieran ignorar, agujeros negros que sólo existen para poner los pelos de punta.

Lugares tenebrosos en la capital

A continuación, una lista de algunos de los lugares más aterradores y peligrosos de la Ciudad de México, según sus mismos habitantes.

La Quebradora

Este lugar no es otra cosa que la Tercera Sección del Bosque de Chapultepec. Rodeado de vegetación, solía ser un lugar propicio para el ejercicio, los picknicks y el amor, sin embargo, en estos días no es más que un paraje solitario y tenebroso, oscuro por las noches y perfecto para ponerse en manos de los delincuentes.

Accidentes, robos a mano armada y asesinatos; en los últimos años este lugar ha sido titular de los periódicos porque está en el gusto de los criminales para cometer sus fechorías.

El Cerro de la Estrella

Este solía ser otro sitio favorito de corredores y toda clase de deportistas que buscaban escapar del ruido de la ciudad. Se ubica en la delegación Iztapalapa y hasta hace unos cinco años era un lugar muy turístico, sin embargo, en algún momento se hizo público –en medios– el caso de un grupo de cuatro personas que, supuestamente, fueron atacadas por una jauría de perros salvajes en este mismo lugar, y a raíz de eso murieron.

De entonces a la fecha, se desató el rumor de la inseguridad en la zona. Entre asaltos, perros diabólicos, secuestradores y grupos satánicos que hacen rituales humanos en las cuevas de este cerro, ya son pocos los que se arriesgan a subir.

El Hoyo

Casi nadie sabe que este lugar existe, porque parece sacado de una película de acción. Ubicada en el cerro del Peñón, sus habitantes construyeron, hace ya mucho tiempo, una colonia irregular a la que mal nombraron «El Hoyo», precisamente porque está instalada en un hueco gigantesco.

Se trata del hogar de la delincuencia organizada por excelencia. Aquí todos se dedican a algo ilegal, y entrar es prácticamente imposible, para quien no pertenece al sitio.

Aunque a simple vista sólo parezca una colonia marginal, tiene toda una organización invisible, auspiciada por el crimen. Cuentan que desde lo más alto del cerro los llamados “halcones” vigilan a todos los que llegan y los que se van, y nadie pasa por ahí sin ser detectado.

Es por todo eso que, ni siquiera la policía puede entrar, y es la guarida perfecta de ladrones y traficantes de droga.

Camino al Ajusco

Sí, se trata de otro espacio más, robado por la delincuencia organizada. Probablemente más de alguno recordará que, el Ajusco, era el pretexto perfecto para las salidas familiares, las escapadas de la escuela y hasta las borracheras.

Pero eso quedó en el pasado, ahora quien visita la zona tiene que ser precavido, porque los criminales están al acecho.

Fue en 2012 cuando se desató el crimen en esta zona, luego de que un grupo de ciclistas profesionales fuera secuestrado, en medio de un recorrido de entrenamiento. Por un tiempo se desencadenó una ola de asaltos, raptos y asesinatos, siendo incluso, lugar elegido por los criminales para tirar cuerpos, con cierta constancia.

Valeria Lira

@CronicaMexicana