La ruta del vino mexicano

Un buen vino en la mesa nunca sobra y dicen que quien acostumbra consumirlo, suele tener un paladar más exquisito que el resto de la población. Eso, aunado a un buen maridaje gastronómico, hacen de esta bebida una de las más apreciadas en todo el planeta.

México, aunque muy pocos lo sepan, tiene en todo el territorio nacional 3 mil 600 hectáreas, que producen más de un millón de cajas de vino al año, de las cuales, sólo se exporta el 10%, por la poca capacidad que tiene la industria para abastecer al mercado.

Y no, no es una cuestión de falta de consumidores, sino de una industria que apenas comenzó a crecer en los primeros años del siglo XXI.

Se sabe que del año 2000 a la fecha, el número de litros consumidos en el país prácticamente se duplicó, pasando de 27 a 55 millones. Y todavía se espera que crezca, de aquí al 2020.

Aun con todo lo anterior, en el mercado nacional, los vinos mexicanos sólo representan el 30%, mientras el resto de los que se venden son importados.

Vino, su producción en todo el país

La producción de esta bebida, tan común en otros países, y aún tan lejana para muchos mexicanos, se concentra en Aguascalientes, Baja California, Querétaro, Zacatecas, Guanajuato, Nuevo León, Coahuila y Chihuahua. Siendo así, no cabe duda que es una industria en pleno desarrollo, y que genera una larga cadena de empleos a lo largo y ancho del país.

Inclusive, dentro de la Ciudad de México, existe una fábrica de vino, llamada «Vinícola Urbana», que es prácticamente única en la capital, y utiliza uvas traídas desde otros estados productores, hasta su planta en Polanco, donde las procesa y pone a la venta cuatro clases diferentes de esta bebida. Además, recientemente, esta empresa comenzó el cultivo de uvas en este mismo lugar, lo que deriva en una variedad de vino hasta antes inexistente, y con características propias de este suelo y clima.

Es así como, si bien México no es un productor muy grande, comparado con países como Francia, Chile o Argentina, sí está dando la batalla por hacer crecer la industria, y sobre todo el mercado interno, creando una nueva necesidad entre los consumidores nacionales.

Es de destacar que, pese a la difícil situación para los empresarios en el país, un nicho de negocio esté floreciendo y tenga tantas perspectivas de prosperidad, a mediano plazo.

Valeria Lira

@CronicaMexicana