¿Se enfrenta la UNAM a una nueva huelga general?

Huelga en la UNAM

Desde 1999 la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no veía venir una crisis tan grave como la que empezó en diciembre de 2019 y no ha terminado hasta hoy. En aquel entonces los grupos estudiantiles y de choque realizaron una huelga en la UNAM general que duró poco más de un año, en respuesta a un intento por subir los costos de las cuotas, las inscripciones y los servicios que se otorgaban a los alumnos en esa época.

Hoy el tema, supuestamente, es la violencia de género ejercida contra las mujeres en las distintas escuelas y facultades de la universidad, y al respecto de la cual se dice que poco han hecho las autoridades; como si el rector o los directores pudieran ponerse a educar machos que ya vienen torcidos desde casa.

Aunque en realidad este paro, que pronto podría convertirse en general, es una respuesta a años y años en que se han dejado crecer grupos porriles y de choque dentro de la máxima casa de estudios, incluyendo por supuesto a los de las famosas feministas que no son sino otro conglomerado de estudiantes fósiles que buscan vivir de la universidad, más no estudiar en ella.

Huelga en la UNAM y lo que se viene

La violencia de género existe y no sólo en la universidad, sino en todo el país con casi 8 feminicidios diarios. Sin embargo, es un problema que va mucho más allá de las instituciones.

Sea o no la causa de la huelga en la UNAM, la realidad es que la violencia de género no va a desaparecer por cerrar las aulas durante un tiempo y menos aún por exigir cosas que no están en manos de las autoridades.

Si maestros, funcionarios y alumnos son misóginos, es porque en México la educación en general y desde casa es altamente machista y misógina. Pero eso no tiene que ver con la forma en que funciona la universidad o con sus protocolos, ya que poco se puede hacer cuando la sociedad machista es mayoría.

Claro que esto es lo que se sabe por encima, por debajo probablemente hay intereses políticos y otros grupos empeñados en que se cierre la universidad para quitar al rector en turno y colocar a otro que responda a lo que ellos desean.

Al final el progreso del país es lo que menos le importa a la colectividad, mientras los medios nos distraen con temas supuestamente “importantes”, que al final redundan en un absurdo, no resuelven nada y nos sumen en un abismo de ignorancia del que tenemos más de 100 años sin poder salir.

@CrónicaMexicana