Covid-19, la crisis económica que no vemos

Covid-19

¿Cuánta gente en México puede darse el lujo de parar de trabajar por varios días, hacer compras para prevenir un desabasto y pasar el tiempo en casa sin hacer gran cosa? En plena crisis del Covid-19 en México, resulta ser que aquí hay 55 millones de pobres que prácticamente viven al día, sin salarios fijos que cubran la canasta básica y sin ahorros para enfrentar todos los días en que no podrán emplearse. De paso tampoco tienen acceso a servicios de salud.

Además de la población en pobreza, hay otro grueso poblacional cuya economía depende de que todo avance, esos son vendedores, maestros, emprendedores y toda la gente que de alguna manera trabaja por su cuenta.

Sólo menos del 2% de los mexicanos se encuentra en una posición de clase alta, es decir, tiene posibilidades, ahorros y hasta dónde atenderse la salud.

El Covid-19 trajo consigo un freno a la economía nacional, pérdidas que son incalculables en la industria, el mercado y especialmente en el bolsillo de los mexicanos.

Covid-19 y la inacción del gobierno

Lo más cuestionable de este caso es que el gobierno mexicano, lejos de agilizar la situación para que afecte al país lo menos posible, decidió simplemente mandar a todos a casa y poner un total freno a la economía nacional. Es como decirle a los más pobres que a causa del Coronavirus mañana no van a comer.

Si bien se trata de una emergencia mundial, en México no se está previniendo que viene una recesión económica muy grave, por lo que este es un pésimo momento para parar las cosas, cerrar las fronteras al comercio y acabar con el consumo local.

Nadie cuestiona la gravedad de la crisis sanitaria, pero las medidas que toma el gobierno no están evitando la propagación del virus y sí están hundiendo a la ya de por sí muy quebrada economía mexicana.

Recordemos que en 2009 la epidemia de Influenza AH1N1 también paró todo durante varios días, aunque al final hasta los organismos oficiales en México afirmaron que la manera en que fue manejada la crisis fue exagerada, un pánico innecesario que tuvo demasiadas consecuencias económicas.

@CrónicaMexicana