México es un país lleno de tradiciones y celebraciones que enriquecen nuestra cultura, y sin duda una de las más arraigadas es el Día de la Virgen de Guadalupe, el 12 de diciembre, fecha que año con año congrega a una gran cantidad de personas y fieles creyentes que acuden a dar gracias a la “Morenita del Tepeyac”. Pero ¿de dónde viene tal fervor por parte de los mexicanos que incluso los hace desplazarse distancias insospechadas?
12 de diciembre, los orígenes de la fiesta
A las faldas del cerro del Tepeyac, ubicado en el norte de lo que hoy es la Ciudad de México, existieron varios poblados mexicas que adoraban a una diosa llamada Tonantzin, considerada la madre de todo lo que existe en la Tierra.
Tras la llegada de los españoles, el capitán Gonzalo de Sandoval se asentó en dicho cerro, renombrándolo como Tepeaquilla y fue por estas épocas, exactamente el 12 de diciembre de 1531, que según las narrativas religiosas de la época, una figura divina se le apareció al indio Juan Diego, solicitándole la construcción de un templo donde pudiera ser adorada, justo ahí enclavado en el cerro, nombrándola por primera vez como Santa María de Guadalupe.
El arraigo
Aproximadamente 150 años después, más específicamente entre los años 1695 y 1709, el templo fue construido bajo las órdenes del arquitecto Pedro de Arrieta, iniciando así con una tradición que siglos más tarde aún perdura en el corazón de los habitantes de México y turistas extranjeros que año con año visitan el lugar.
Dicha tradición reza que cada 12 de diciembre se celebre el Día de la Virgen de Guadalupe, conmemorando el aniversario de su primera aparición y exhibiendo en el altar del templo, el supuesto manto de Juan Diego, donde según los relatos, la “Virgen Morena” plasmó su imagen como prueba para que los sacerdotes creyeran en su aparición.
La devoción y la actualidad
En el siglo XIX, los poblados comenzaron a crecer gracias a la urbanización de la ciudad, y adquirió el nombre de Villa de Guadalupe-Hidalgo, en el año de 1828, razón por la que hasta la fecha se sigue conociendo por mucha gente como “La Villa”.
Gracias justamente al crecimiento de la ciudad y a las crónicas que fueron transmitiéndose de generación en generación, cada año llegan cientos de miles de peregrinos al templo para solicitar o agradecer por algún favor a la Virgen.
Así en 1976 fue edificada la nueva Basílica de Guadalupe, obra del reconocido arquitecto Pedro Ramírez Vázquez y que hasta el día de hoy se ha convertido en el segundo santuario religioso más visitado del mundo, sólo por detrás de la Basílica de San Pedro en el Vaticano; se estima que cada 12 de diciembre, llegan aproximadamente 7 millones de fieles de todo el mundo. Es por esto que la tradición de celebrar a la Virgen de Guadalupe es motivo de orgullo para los mexicanos, pues el hecho de sentirla nuestra, enaltece más ese orgullo patriótico que nos caracteriza, sumado al gran fervor que personajes icónicos de la religión católica han demostrado por ella a lo largo de la historia.
@CronicaMexicana
Fuentes: https://www.chilango.com/ocio/datos-curiosos-basilica-de-guadalupe/